lunes, 5 de julio de 2010

Robo de parte del ajuar de la Virgen de la Misericordia en su capilla

A lo largo del Domingo pasado la Imagen Titular de la Santísima Virgen de la Misericordia fue objeto de un acto vandálico sin precedentes, en la propia Capilla donde recibe habitualmente culto, la Capilla de San Juan Bautista de la Parroquia de San Pedro Apóstol de Ciudad Real.


A pesar de los reclinatorios y cordones que limitan el acceso a las imágenes titulares de Nuestro Padre Jesús Nazareno y la Santísima Virgen de la Misericordia, empieza a ser habitual que "vándalos" disfrazados de "fieles cristianos" accedan a ellas y, en el caso de la Santísima Virgen de la Misericorida, le sean substraídos de 5 a 6 Santos Rosarios por año. Pero esta vez han llegado más lejos...

En la tarde del Domingo le fue arrancado el broche que prendía de su pecho y que formaba parte, hasta ese día, del patrimonio de la Hermandad.

Más allá del mero robo de estas joyas, se vaticina un gran peligro. El peligro de posibles desperfectos en la talla por los tirones con los que sustraen los rosarios de sus manos, o el enorme riesgo de tirar la Imagen al intentar sustraer de un broche situado a más de 2,5 metros de altura.

Ante estos riesgos, la Hermandad ha tomado las primeras medidas de urgencia como son la de NO PRENDER BROCHE ALGUNO en el pecho de su Imagen Titular y colocar en su mano izquierda un Rosario de coste reducido no volviendo a colocar ninguno de los valiosísimo Rosarios que conforman el patrimonio de la Hermandad.

Independientemente de esto, se está preparando una reunión de urgencia entre la Junta de Gobierno de la Hermandad y la Parroquia de San Pedro, Sede canónica y lugar donde ocurrieron los hechos, para tomar medidas preventivas y valorar acciones a tomar sobre los responsables ante la aparición de pruebas que podrían dar lugar a su identificación.

La Hermandad de la Santísima Virgen de la Misericordia lamenta profundamente este ultraje de su Imagen Titular con el único fin de hacerse con una reliquia u objeto de esta talla tan venerada en la ciudad. Así, y ante lo inmoral y anticristiano de su actuación, a la Hermandad, al margen de las medidas comentadas no le cabe más que rezar y encomendar a su Imagen Titular a los sujetos responsables de tal atrocidad y rezar por su arrepentimiento y reposición de lo substraído.

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