
ü ¿Tienes algún apodo debajo del paso? Si es si dinos cual y el motivo.
No lo llamaría apodo, somos dos Santos en la cuadrilla y yo soy el chiquitín, así es que, me toca ser Santitos.
ü ¿Desde cuándo eres hermano de la Esperanza? ¿Y en qué año entrastes a formar parte de la cuadrilla de la Esperanza?
Las dos fechas coinciden en el año 2001.
ü ¿Qué te guio hacerte costalero de la Esperanza de Ciudad Real?
La verdad es que me tuvieron que dar el empujón porque era muy joven, ya sacaba otro paso y no me atrevía pero al final, gracias a dios, mi gente me apoyo y me dieron fuerzas.
ü ¿Tenias algún familiar o amigo involucrado en la cofradía?
Como os digo me tuvieron que apoyar para dar el paso de pertenecer a la cuadrilla de nuestra señora y esa gente fue nuestro actual capataz Juanjo Laín, que en esa época era costalero de la morena y también coincidimos en la cuadrilla del prendimiento y sobre todo Carlos Galiano que también entraba a formar parte ese año de la cuadrilla y nos unía, y aun nos une, una gran amistad .
ü ¿Cómo recuerdas tu primer año dentro de la Hermandad de la Esperanza?
Pues cuando miro atrás parece que fue ayer, fue un año muy bonito. Ese año descubrí lo que es llevar un palio y lo que se disfruta haciéndolo. Mucha gente me decía que no me metiese que era muy joven, tenía 17 años, incluso el entonces hermano mayor Dn. Luis Galiano se opuso a que los tres menores que fuimos ese año formáramos parte de la cuadrilla pero que al final se le pudo convencer.
ü De todas las hermandades de Ciudad Real, con sus imágenes titulares ¿Por qué la Esperanza?
No sé explicarlo, tuve la suerte de fijarme en el rostro de la “morena” y de tener a la gente más apropiada para enseñarme a quererla como a una madre. La primera vez que la miras, cuando conoces la hermandad y a su gente es muy difícil resistirse.
ü Si tuvieses que recomendar a un nuevo cofrade costalero que se meta debajo de la Esperanza... ¿Qué le dirías?
Que adelante que le echase ganas y valentía y que abra bien los ojos porque se aprende mucho de la gente que hay debajo y por fuera del paso.
ü ¿Cómo empezó tu afición por el mundo del costal?
Desde pequeño he sido muy cofrade, no faltaba a ninguna salida, arrastraba a mi padre a ver una y otra vez a las hermandades en distintos puntos de su recorrido y cuando a los 15 años me pidieron entrar en una cuadrilla por falta de gente no me lo pensé ni dos veces.
ü ¿Qué recuerdas de esos inicios de aprendiz debajo del paso?
Tengo grabada a fuego la primera “levanta”, fue dentro del Guardapasos y estaba asustado porque no sabía nada más que cuando oyese el martillo tenía que saltar. Cuando por primera vez note los kilos encima pensé” esto pesa mucho y no voy a poder”, pero gracias a mis compañeros aprendí a aguantarlos e incluso a disfrutarlos. Tenía un costalillo blanco muy pequeño, de esos que llamamos servilletas, y no paraba de escurrirme de pisar al de delante, era entero un manojo de nervios y para rematar, el día de la salida el que ocupaba el zanco derecho se lesiono en la calle Lirio y tuve que hacerme cargo yo de llevarlo y no tenía ni idea de cómo se hacía pero todo salió bastante mejor de lo que me esperaba y conseguí pasar esa dura prueba sobre todo gracias al que me toco fijarme.
ü ¿Alguna anécdota curiosa debajo del paso en los años que has ido debajo?
Ocurren muchas cada ensayo y cada salida, siempre estas de risas con tus compañeros pero sí recuerdo una.
Ocurrió en mí segundo año, un viernes santo ya llegando de vuelta a la iglesia de la merced, cuando arriamos el paso, tres mujeres de avanzada edad empezaron a cantarle a coro una especie de saeta, o eso creímos. La situación fue un tanto extraña, tanto que a nuestro capataz le dio un ataque de risa que tuvo que ocultar tapándose con la chaqueta y bajo las cornisas, varios costaleros nos salimos del paso para ver lo que pasaba porque no dábamos crédito a nuestros oídos y tardamos en reanudar la marcha bastante tiempo porque ni la banda podía tocar después de lo vivido, creo que ha sido la única vez que he visto llorando a una cuadrilla sin ser de emoción o de pena.
ü ¿Qué diferencia destacarías de tu Hermandad con el resto de Hermandades de Ciudad Real?
Sobre todo la humildad con la que se trabaja. Nuestra junta directiva ha demostrado que es muy capaz de todo pero aún así, si te tienen que pedir ayuda o consejo no lo dudan. Todo el mundo es bien recibido para ayudar en las tareas de preparación de la estación de penitencia o cualquier culto de hermandad, cosa que te hace conocer e involucrarte más con la hermandad.
ü ¿De todos los capataces que han tocado el martillo de la Esperanza, con cual te quedas y por qué?
He tenido la suerte de estar con los dos que ha tenido la cuadrilla. Los dos han sido muy importantes para la hermandad, el primero, Juan, tuvo el valor de sacar por primera vez a costal a la morena y de juntar una cuadrilla totalmente nueva y el actual, Juanjo, nos ha hecho crecer en número y como costaleros, nos ha dado una identidad y lo más importante, a convertido lo que era una cuadrilla de costaleros en una gran familia donde los hermanos mimamos a nuestra madre.

ü ¿Cuál es el punto en el nuevo recorrido de la Hermandad que más te guste y por qué?
Desde que pasamos la plaza mayor en adelante, ese tramo es para nosotros, Ciudad Real nos devuelve a nuestra Esperanza, es el momento de guerrear con los kilos, de recogerte en el silencio de la calle de la Mata y de emocionarte cuando se rompe con los aplausos de la gente en el momento de llegar al barrio.
ü ¿Y el punto de recorrido que menos te guste y por qué?
La plaza mayor sin duda. Sé que es el punto más famoso del recorrido del martes santo pero se sale de mi manera de entender la Semana Santa, no lo comparto.
ü ¿Qué recuerdos te dejo la Estación de Penitencia realizada el año pasado con tu Hermandad?
Muy agridulces, de la angustiosa espera antes de la salida pasamos a la alegría de ver a la esperanza por las calles de Ciudad Real y de nuevo a la tristeza de tener que recogerse antes de tiempo debido al mal tiempo.
ü ¿Cuál es tu marcha preferida de Palio (en general)?
Es difícil elegir solo una, hay grandes marchas en este estilo,” La Macarena de Paco Lola”, “Triana de Esperanza”, “Aniversario Macareno”, “Callejuela de la O”, “Madruga de canela y clavo”…
ü ¿Cuál es la marcha del repertorio de este año para la Esperanza que más te guste? Explícanos el por qué.
Del repertorio me quedo con “Tras tu manto Esperanza “, ya que es la marcha dedicada a la señora y refleja muy bien el espíritu de la hermandad.
ü ¿Qué esperas de la Estación de Penitencia del Martes Santo del 2012?
Que sea un día en el que el sol sea el segundo protagonista y que sepamos transmitir a los ciudadrealeños con nuestro trabajo la devoción a la Esperanza.
ü ¿Qué emociones te llenan cada Martes Santo?
Muchas, la satisfacción del trabajo bien hecho, la alegría que desprende el palio de la señora, la tristeza de la “recogía” que entre el cansancio y la compañía de la gente que más aprecias y quieres se convierte en unas lagrimas que intentas consolar y lo que consigues es contagiarte aún más.
ü ¿Cuál crees que es la clave o las claves para que una cuadrilla esté unida y además lo pueda reflejar en la calle el día de la procesión?
Creo que es porque somos algo más que una cuadrilla, somos una gran familia, todo gracias al gran esfuerzo que realiza en cuerpo de capataces y la junta de gobierno cada año para unirnos aún más a base de convivencias y actos exclusivamente para la cuadrilla.
ü ¿Mejorarías algo de la cuadrilla de la Esperanza?
Cuando algo funciona también lo mejor es no tocar nada pero todo es mejorable año a año si nos esforzamos y seguimos trabajando juntos.
ü ¿Qué se siente en los minutos previos en los que esperas que el sol ilumine la cara de tu Esperanza?
Muchísimos nervios.
ü Si tuvieras que elegir, ¿Misterio o Palio?
Palio
ü ¿Eres de los costaleros que salen por devoción o por afición? Y dinos tu opinión al respecto.
Creo que ambas cosas están directamente relacionadas, la devoción hace afición y la afición provoca con el tiempo la devoción.
ü ¿Qué opinas de la vida de tu Hermandad (cultos, triduos, actos cofrades, grupo joven...)?
Es un trabajo muy bien dirigido, cada año tenemos actividades nuevas que hacen crecer a la hermandad y los unos cultos trabajados al detalle pero es una lástima no conseguir involucrar a todos cuanto quisiéramos para participar en ellos.
ü ¿A quién consideras clave en la Hermandad de la Esperanza?
A todos y cada uno de los hermanos que formamos parte de esto, cada nazareno, costalero, miembros de la junta y amigos de la hermandad, si algo falta, todo el bloque se vendría abajo.
ü ¿Sin quién o sin qué tu vida cofrade no sería igual?
Sin duda alguna mi gran amigo y compañero de fatigas Sergio Córdoba, con el he compartido casi todo el camino del costalero y de las cofradías, hemos aprendido y crecido juntos y ahora seguimos disfrutando de todo esto. Siempre le observo porque aprendo mucho de él y si no es él que me tira de la ropa no voy seguro, tendríais que vernos buscándonos por el Guardapasos para colocarnos el costal entre los dos. Pero no me puedo olvidar de los que me han enseñado todo lo que tiene que saber un costalero, Eugenio Serrano y aun más Juanjo Laín, que cuando era un novato me explicaban la técnica de cómo se hace una buena ropa, de colocarte bajo el palo, y de cómo llevar un zanco.
Por último está Carlos Galiano, el me ha enseñado todo lo demás de la Semana Santa en general, la cultura de este mundillo, el porqué de las cosas, sin estas personas no podría disfrutar de la manera que lo hago de este gran arte que es la Semana Santa.
ü ¿Qué aspectos crees que debe intentar mejorar en la Hermandad de la Esperanza?
No depender de nadie, salvo de cada uno, pero me encantaría ver a mi hermandad en la calle con un gran cortejo de nazarenos alumbrando el camino de la Esperanza.
ü Un momento para enmarcar de la Semana Santa de Ciudad Real? ¿Y de tu hermandad?
Cualquier hermandad pasando por el pasaje de la merced es un capricho para los ojos. De mi hermandad lo más bonito quizás sea la entrada por la emotividad del momento.
ü ¿Qué te parece el blog?
Hacéis un grandísimo trabajo informando de toda la actualidad cofrade.
ü Despídete con una frase cofrade.
Siempre de frente, roneando con la morena hacia el martes santo para disfrutarla todos los ciudadrealeños.
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