jueves, 14 de julio de 2011

HISTORIA DE LA MÚSICA (VI)

SEXTA ETAPA: RENACER DEL GENERO CON GRANDES MARCHAS

          Superados los años de la guerra civil, la marcha de procesión vive una espléndida etapa. Son muchos los compositores, tanto de origen militar como civil, que se dedican a escribir grandes marchas procesionales. En esta época en Sevilla hay que destacar dos grandes marchas que se exportaron fácilmente al resto de Andalucía y que están en el paquete de las denominadas "clásicas" desde entonces. Se trata de "Jesús de las Penas" y "Virgen de las Aguas".
          "Jesús de las Penas" es una marcha de corte fúnebre, este tipo de marchas seguía teniendo su grupo de adeptos, a pesar del predominante estilo rítmico y dinámico impuesto por López Farfán. Fue compuesta en 1943 por Antonio Pantión que era catedrático de piano en el Conservatorio hispalense. Fue instruido por el mítico Joaquín Turina. Mientras estudiaba se dedicaba a componer sinfonías para el NO-DO. Una de ellas sirvió como base para la marcha que nos ocupa. Fue dedicada a la imagen de Ntro. Padre Jesús de las Penas de la hermandad de San Vicente de Sevilla de la que fue miembro refundador. El nombre de Pantión está entre los de los más grandes maestros compositores de marchas. Alternó en su repertorio el estilo fúnebre: "Tus Dolores son mis Penas" (1970) o "Cristo de las Siete Palabras" (1955), y el lopézfarfaniano: "Esperanza Trinitaria" (1971) o "Virgen de las Penas" (1973), todas ellas dedicadas a imágenes sevillanas salvo la última que está dedicada a la Virgen de las Penas de la Hdad. de la Expiración de Málaga. Pantión también destacó por componer piezas de capilla. De hecho se puede afirmar que sus coplas dedicadas a las hermandades sevillanas de Vera-Cruz y Penas de San Vicente son junto a las célebres "Saetas del Silencio" las músicas de este género que más se interpretan.
          "Virgen de las Aguas" es una excelente marcha típica de "bulla" con cornetas y tambores que fue compuesta por el músico militar subdirector de Soria 9, Santiago Ramos en 1953. Está dedicada a la Virgen de las Aguas, cotitular de la hermandad del Museo de Sevilla. No obstante, se le puede considerar una marcha "semigaditana" pues su autor se inspiró en la Playa de la Victoria durante sus veraneos en esta ciudad para componerla. Esta marcha es indispensable en el recorrido de cualquier hermandad de barrio y tanto la introducción con cornetas como el trío final con llamadas de trompetas son insuperables. Su autor sólo compuso esta marcha, aparte de algunos pasodobles, pues tuvo la desgracia de fallecer prematuramente en un accidente.

1 comentario:

PEPE LASALA dijo...

Preciosa la marcha Virgen de las Aguas, lo que no sabía era que el autor se había inspirado en sus veraneos en la playa de la Victoria, la cuál tengo el gusto de conocer. Un fuerte abrazo desde la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
http://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/