Otra igualá terminada, otro paso más hacia la lejana Semana Santa de este año.
Como ya anunciábamos, ayer dio lugar la igualá de la Hermandad de la Esperanza donde ya se esperaba una gran afluencia de costaleros.
Los que hayáis tenido la oportunidad de visitar la casa de hermandad, sabéis que sus dimensiones no son muy grandes, pero que puede albergar fácilmente una cuadrilla de costaleros. Sin embargo ayer, y a pesar de la falta de una proporción de gente por trabajo, la casa de hermandad tuvo el aforo más que completo, estuvo a rebosar.
Antes de que Juanjo comenzase a igualar, tanto él como el Hermano Mayor dirigieron unas palabras a toda la cuadrilla, no solo para hablar sobre el desarrollo de los ensayo de este año, sino también para expresar su gratificación al poder ver que el trabajo y las expectativas sobre las que formaron sus sueños estaban más que cumplidas.
Respecto a las novedades que se podrán ver este año destacan la nueva parihuela, que evitará que se suspendan algunos de los por las inclemencias del tiempo, y que debido a la gran afluencia de costaleros, este año habrá dos cuadrillas, una alta y otra baja.
Otro de los cambios, es que se cambia el lugar de ensayo. La nueva parihuela se guardará en el guardapasos, donde se harán todos los ensayos de este año a diferencia de anteriores, que se realizaba en el barrio del Pilar.
Y bueno no mucho más que destacar, la igualá se fue realizando poco a poco, reestructurando palos para cuadrar a las dos cuadrillas, tomando datos a los nuevos, veteranos y algunos más que veteranos... mientras que los que esperaban su turno o los que ya habían pasado por el dedo del capataz, tomaban algo en la parte de abajo de la casa de hermandad.
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